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A pesar de los cambios tan bruscos que hemos vivido últimamente con la tecnología, la radio se ha mantenido al margen en cuanto a los medios de comunicación, siendo siempre de gran ayuda en momentos de crisis (tormentas, huracanes, ciclones, etc.) y ¿por qué no?, para entretener e informar a la sociedad con la variedad de recursos que podemos utilizar con ella.
Dentro de la riqueza que podemos expresar en la radio, sistematizando, encontramos cinco recursos radiofónicos para la elaboración de un buen programa, como Kaplún aconseja la regla de oro de la “piel”, ya que es “interesante para captar la atención del oyente, aprovechar la sugestión del medio, estimulando la imaginación del receptor y suscitando imágenes auditivas, desplegar una variada gama de recursos expresivos, crear una comunicación afectiva, que no sólo hable al intelecto del oyente, sino que también convoque su sensibilidad y su participación emotiva…”
Como nos explica Pilar Victoria, nosotros contamos con cinco recursos en la radio:
La palabra (lenguaje y redacción)
Debemos de tener en claro que cada elemento del lenguaje de la radio, debe de tener sentido para un público muy variado en su educación y léxico, es necesario “traducir” todo tipo de lenguaje técnico (científico, abogado, médico) a un léxico comprensible por un auditorio heterogéneo.
Es importante mencionar que también no se debe de improvisar, para ello, el locutor debe de tener un conocimiento previo de lo que se está diciendo.
Po lo tanto el lenguaje radiofónico debe de ser claro, sencillo y de comprensión casi inmediata.
La voz (locución, micrófonos, planos de voces)
La voz es el código sonoro más efectivo para transmitir un mensaje radiofónico, según A. Merayo Pérez “el mensaje ‘prende’ en el público mejor por como se dice no por lo que se dice”. La velocidad de locución es determinante en la comprensión del mensaje. Es necesario mencionar cada palabra con el énfasis indicado, además de pronunciar las palabras claramente.
En cuanto a los micrófonos, en la radio, deben de considerarse tres factores para elegirlos: la sensibilidad, la direccionalidad y la respuesta de frecuencia.
El silencio
Por lo general, cuando un locutor cae en el silencio, el escucha piensa que esta cometiendo un gran error, o que simplemente ya no tiene que decir. El silencio en la radio es necesario en muchas ocasiones, sobre todo para causar expectación en el auditorio, o también para darle la pausa que el mensaje necesita, siempre utilizando este recurso en el minuto adecuado.
La Música
Roland Barthes asegura que “la música no es otra cosa que una cualidad del lenguaje”, unos años antes de que se iniciara la radio como tal, en 1915, el principal propósito era sintonizar música hasta todos los hogares por medio de diferentes longitudes de onda. Con el paso del tiempo ha evolucionado, hasta el punto de promocionar a un grupo musical, de darle más vida al programa que se emite, y de causar sensaciones al escucha, también debe de ser utilizada en el momento indicado.
Efectos de sonido
Los efectos de sonido son cortos que no son palabras, producidos por el ser humano, los animales y el medio ambiente; según Mario Kaplún, conforman “el decorado radiofónico”.
Si aprendemos a utilizar estos recursos radiofónicos como productores y locutores de radio, el programa será fresco, interesante y con grandes posibilidades de éxito.
Dentro de la riqueza que podemos expresar en la radio, sistematizando, encontramos cinco recursos radiofónicos para la elaboración de un buen programa, como Kaplún aconseja la regla de oro de la “piel”, ya que es “interesante para captar la atención del oyente, aprovechar la sugestión del medio, estimulando la imaginación del receptor y suscitando imágenes auditivas, desplegar una variada gama de recursos expresivos, crear una comunicación afectiva, que no sólo hable al intelecto del oyente, sino que también convoque su sensibilidad y su participación emotiva…”
Como nos explica Pilar Victoria, nosotros contamos con cinco recursos en la radio:
La palabra (lenguaje y redacción)
Debemos de tener en claro que cada elemento del lenguaje de la radio, debe de tener sentido para un público muy variado en su educación y léxico, es necesario “traducir” todo tipo de lenguaje técnico (científico, abogado, médico) a un léxico comprensible por un auditorio heterogéneo.
Es importante mencionar que también no se debe de improvisar, para ello, el locutor debe de tener un conocimiento previo de lo que se está diciendo.
Po lo tanto el lenguaje radiofónico debe de ser claro, sencillo y de comprensión casi inmediata.
La voz (locución, micrófonos, planos de voces)
La voz es el código sonoro más efectivo para transmitir un mensaje radiofónico, según A. Merayo Pérez “el mensaje ‘prende’ en el público mejor por como se dice no por lo que se dice”. La velocidad de locución es determinante en la comprensión del mensaje. Es necesario mencionar cada palabra con el énfasis indicado, además de pronunciar las palabras claramente.
En cuanto a los micrófonos, en la radio, deben de considerarse tres factores para elegirlos: la sensibilidad, la direccionalidad y la respuesta de frecuencia.
El silencio
Por lo general, cuando un locutor cae en el silencio, el escucha piensa que esta cometiendo un gran error, o que simplemente ya no tiene que decir. El silencio en la radio es necesario en muchas ocasiones, sobre todo para causar expectación en el auditorio, o también para darle la pausa que el mensaje necesita, siempre utilizando este recurso en el minuto adecuado.
La Música
Roland Barthes asegura que “la música no es otra cosa que una cualidad del lenguaje”, unos años antes de que se iniciara la radio como tal, en 1915, el principal propósito era sintonizar música hasta todos los hogares por medio de diferentes longitudes de onda. Con el paso del tiempo ha evolucionado, hasta el punto de promocionar a un grupo musical, de darle más vida al programa que se emite, y de causar sensaciones al escucha, también debe de ser utilizada en el momento indicado.
Efectos de sonido
Los efectos de sonido son cortos que no son palabras, producidos por el ser humano, los animales y el medio ambiente; según Mario Kaplún, conforman “el decorado radiofónico”.
Si aprendemos a utilizar estos recursos radiofónicos como productores y locutores de radio, el programa será fresco, interesante y con grandes posibilidades de éxito.
Bibliografia:
-Producción Radiofónica (Tecnicas básicas)
Autor: Pilar Victoria
Ed. Trillas
-Revista Soundcheck
-Wikipedia: Radio